El Pop es un género que viene a la par del nacimiento del Rock desde los años 40’/50′ y aún así recién en estos tiempos y de a poco vienen asomando documentales y ediciones que se atreven a analizar su sonido particular y sus elementos musicales más que su contenido visual: shows, videoclips, vestuario.

«Fábrica de Canciones» es una autopublicación de 2017 y es el resultado de tres años de investigación y trabajo de su autora, Mariana Binder, quien en principio pretendía hacer un análisis minucioso de la lista de canciones en los primeros puestos de los charts internacionales para intentar encontrar una constante, pero que finalmente decidió escribir no solo para músicos sino también para el público general. Es una lectura amena que consta de dos partes: una primera donde se analiza la historia del género, su público y la relación con la sociedad y una segunda donde aparecen elementos musicales propios del género (instrumentación, melodías, líneas de bajo, armonía, etc.).

También funciona como un «manual de instrucciones» o guiños sobre cómo escribir un HIT: «Muchos músicos se alejan de esa palabra, cómo si fuese un pecado escribir una canción que se adhiera a la memoria al escucharla por primera vez, existe un prejuicio en contra de los buenos estribillos, pero la dinámica de la música funciona a partir de un tema melódico que se ve transformado a través de la repetición, el contraste y la variación, y actualmente encontramos canciones con ausencia total de estribillo y con una melodía casi «mántrica» que se repite una y otra vez, plana melódica y armónicamente, con poco movimiento y que uno no puede llegar a tararear y por lo tanto se pierde en el éter…» dijo su autora.

En el Pop el Hook (o gancho) es un elemento primordial en la composición, que puede incluir la repetición de una nota o serie de notas, una frase lírica, líneas completas o incluso un verso entero, pueden ser elementos textuales o no textuales, uno de los más utilizados es el «Millennial Whoop«, una especie de grito melodioso que va de la 5ta a 3ra nota de un acorde e interpretado con fonemas: oh, wa-oh, wa-oh, ah, uh (…).

También es frecuente notar que las canciones pop utilizan progresiones de cuatro acordes y es por ello que nos podemos encontrar con una variedad de canciones ilimitada con solo ejecutar una misma progresión. La banda australiana «The Axis of Awesome» publicó un video parodia con respecto a esta constante:

No hay que obviar que la invasión audiovisual que creció a partir de la década del 80′ (fuera de los elementos puramente musicales) también influyó en la industria y en la masificación no solo del Pop, también de otros géneros. La industria de los videoclips y los espacios televisivos para difundirlos fueron in crescendo hasta el día de hoy.

Como novedad, el libro esta acompañado también por un podcast disponible en Spotify.

Podés encontrar «Fábrica…» en Google Libros, o a través de Mercado Libre y en la ciudad de Tandil está disponible en «La Casa Azul Libros» (Pasaje Furnier 19).

También lo podés comprar a través de este botón de pago, dejá tus datos y la autora lo envía hasta la dirección indicada:

Invitame un café en cafecito.app