“Other Music” fue una emblemática tienda de discos de Nueva York que cerró sus puertas en 2016 y estaba ubicada en East Village (4th Street y Lafayette) desde 1995. Aún podemos ver lo que era su fachada y parte de su interior gracias a la tecnología de Street View de Google, aunque la misma tecnología no fue tan benevolente con este comercio, ya que la demanda de vinilos, cassettes y cds decreció a medida que fueron apareciendo las plataformas como Spotify, Deezer, Apple Music y tantas otras que fueron surgiendo en la última década.
Más que una casa de música, era un templo donde sus clientes podían conocer bandas nuevas, ya sea escuchándolas en vivo en el local o a través de las recomendaciones de sus empleados que cumplían el rol de curadores de todo el material que allí había y reproducían continuamente en sus diferentes formatos: “Antes de internet y los Iphones la gente confiaba en otras personas” contaba uno de los ex-curadores parte del staff del local haciendo referencia a las recomendaciones que hacían a los clientes. El staff no solo debía vender el material, también tenía que tener un conocimiento muy sólido sobre la música que tenían disponible en la tienda.
En 2019 la dupla conformada por Puloma Basu y Rob Hatch-Miller presentó “Other Music: Documentary”, un excelente material que guarda en formato audiovisual 20 años de historia de un lugar que fue centro y motor de la música indie-emergente en Nueva York.
La tienda fundada por Josh Madell y Chris Vanderloo, no era como las clásicas que uno podía llegar a encontrar entre los ’90 y entrados los 2000, antes de que la industria de la música mudara a lo digital. Si bien contaba con espacios similares a los de grandes casas de música, la forma de recomendar o incluso clasificar los discos distaban bastante a lo que cualquiera estaba acostumbrado.
Los álbumes en los exhibidores tenían una detallada y poética descripción del contenido, pero además estaban clasificados por géneros musicales mucho más específicos, no solo Rock, Pop, Jazz, o World Music. Dentro de Psychedelia por ejemplo se incluía Krautrock, Prog o Acid Folk. En World Music aparecían en realidad discos de pop europeo de los ’60, música experimental, o sonidos de vanguardia; e incluso crearon categorías propias e inexistentes en la industria musical como: IN, OUT o THEN.
La música en formato digital es más accesible, ya que le permite al consumidor escucharla en cualquier momento y lugar, saltar de un artista a otro sin necesidad de cargar con grandes cantidades de cds y cassettes, es por eso que son cada vez más escasos los lugares específicos que ofrecen álbumes en formato físico (a pesar de que las grandes discográficas han vuelto a producir vinilos e incluso los artistas independientes se esfuerzan por poder financiar sus trabajos en estos formatos).
“Other Music” será recordado tanto por los clientes neoyorkinos, como por los melómanos del resto del mundo que se acercaban al lugar dentro de su itinerario turístico, y para quienes no lo conocieron queda la huella en este documental que nos acerca un poco más a la otra cara de la industria musical: el underground.
